sábado, 29 de septiembre de 2012

Inkallajta Ciudad del Inca

Construida hace más de medio siglo, Inkallajta es uno de los destinos más importantes del país para los amantes de la arqueología. Está en el municipio de Pocona, a 142 kilómetros al este de la ciudad de Cochabamba.

Más de medio siglo de vida. Pocona es de gran diversidad paisajística y tierras fértiles, razón por la que numerosas culturas se asentaron en la zona, antes de la colonización española.

Según estudios arqueológicos, Inkallajta fue construida por el inca Tupac Yupanqui cerca del año 1470, y posteriormente reconstruida por su hijo, Wayna Capac.

El lugar tiene las características de una ciudad inca provincial, pero además, los estudios de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) señalan que tenía funciones políticas, administrativas, rituales, militares y domésticas.

Edificaciones históricas. Las ruinas de esta ciudad tienen una arquitectura monumental. Un ejemplo es la Kallanka, la mayor estructura que existe en toda la América Precolombina. Mide 26x78 metros cuadrados. El sitio cuenta con una muralla perimetral escalonada y fortificada que llega a medir 5 metros de altura a la que se le atribuye una función defensiva.

El torreón astronómico es una estructura redonda aserrada que según investigadores sirvió como un antiguo calendario astronómico para marcar las estaciones y las temporadas de siembra y cosecha.

En la parte frontal de la Kallanka está una roca rodeada de una estructura en forma de media cruz andina, identificada como un "Ushnu" o altar, desde donde el Inca se dirigía a la gente que habitaba el lugar. Esta estructura le confiere al sitio un carácter ritual.

Al oeste de Incallajta está la cascada o "Pajcha" y que se cree, sirvió para el aprovisionamiento de agua, para el culto a la Pachamama y a la fertilidad. Hoy es uno de los atractivos naturales del Sitio.

En el trayecto. Durante el recorrido para llegar a Incallajta, se puede visitar la iglesia de Santa Vera Cruz Tatala, patrono de la fertilidad. Es visitada cada 2 de mayo por personas que desean tener hijos y que sus animales de corral se reproduzcan. Se pasa también por diferentes poblaciones del Valle Alto Cochabambino.


jueves, 27 de septiembre de 2012

Presentan posible versión de 'Mona Lisa' más joven

Una fundación suiza presentó este jueves un cuadro, afirmando que se trata de una versión de la famosa Gioconda de Leonardo da Vinci anterior a la que se encuentra en el museo del Louvre, si bien varios expertos juzgan poco probable que así sea.

"Pruebas históricas parecen indicar que Leonardo de Vinci dejó sin terminar un retrato anterior de 'Mona Lisa' en el que está flanqueada por columnas", indicó en un comunicado la Fundación Mona Lisa, con sede en Zúrich.

El cuadro, llamado "Isleworth Mona Lisa", permaneció 40 años en un sótano. En 2003, fue adquirido por un consorcio privado que se mantiene en el anonimato.

Según la Fundación Mona Lisa, 35 años de investigación indican que el cuadro "fue pintado por Leonardo más o menos 10 años antes que su célebre hermana, expuesta en el Museo del Louvre" en París.

La Fundación también publica este jueves un libro de 320 páginas, titulado "Mona Lisa, la versión anterior", que reúne las pruebas que, según sus autores, demuestran que esta versión anterior ha sido pintada por el maestro italiano.

No obstante, varios expertos, como el historiador del arte Martin Kemp, de la Universidad de Oxford, dudan de que Leonardo de Vinci haya pintado una versión anterior de la Gioconda.

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lunes, 24 de septiembre de 2012

El polémico científico surcoreano Hwang busca clonar un mamut



Un laboratorio de bioingeniería surcoreano liderado por el polémico científico especialista en células madre Hwang Woo-suk confirmó hoy que ha emprendido un proyecto dirigido a lograr la clonación de una especie de mamut extinguida hace 4.500 años.

Con este objetivo, la surcoreana Fundación de Investigación Sooam Biotech ha firmado un acuerdo con la Universidad Federal Nororiental de Rusia que le da el derecho exclusivo de estudiar las células de mamut encontradas semanas atrás en el noroeste de Siberia, según responsables del laboratorio citados por la agencia Yonhap.

Los investigadores de la fundación surcoreana intentarán clonar al animal, un mamut lanudo, mediante el uso de sus muestras de tejido junto con óvulos de una elefante indio actual.

Después de aplicar a las células un proceso de transferencia nuclear, paso habitual en los procesos de clonación, los óvulos se implantarán en el útero de un elefante vivo, que gestará al mamut durante 22 meses.

"Al haber recuperado muestras frescas de regiones polares nunca antes exploradas en Siberia, éste será un importante punto de inflexión hacia la clonación del extinto mamut", indicó a Yonhap el profesor Hwang.

Los expertos consideran que clonar un mamut es posible, ya que las células de ese animal prehistórico pueden encontrarse tanto en su sangre y órganos internos, como en la piel y los huesos.

El acuerdo con la universidad rusa se ha producido seis meses después de que ambas partes firmaron un primer pacto para que los investigadores surcoreanos pudieran utilizar las muestras tomadas de restos de mamut hallados en los glaciares de la República de Sajá.

El veterinario e investigador Hwang Woo-suk, considerado en su momento un pionero en el ámbito de las células madre al clonar un perro en 2005, cayó en desgracia en 2006, cuando fue acusado de desviar fondos públicos y falsificar pruebas científicas para confirmar sus novedosas teorías sobre clonación humana.
En 2009, un tribunal de Seúl le condenó a dos años de prisión con suspensión de la pena y actualmente lleva a cabo sus investigaciones en el sector privado.

domingo, 23 de septiembre de 2012

Estudio revela nueva luz sobre los posibles orígenes del hombre moderno

La diversificación (o separación) genética más antigua de la historia de la humanidad remonta a hace 100.000 años, mucho antes de que los ancestros del hombre moderno emigraran de África, según un estudio que arroja nueva luz sobre los posibles orígenes del hombre moderno.

La investigación, publicada en la revista estadounidense Science del 21 de septiembre, fue realizada en 220 miembros de grupos autóctonos sudafricanos, los Khoi y los San y confirma que ambos grupos se separaron de la rama ancestral común del resto de los humanos modernos hace 100.000 años.

Esto permitió analizar 2,3 millones de variaciones genéticas por persona, un número sin precedentes en estudios anteriores.

El análisis genético indicaría principalmente que la cuna del hombre moderno no se concentraría únicamente en África del Este, como se creía hasta ahora y hacen pensar “los archivos arqueológicos”, sino que tendría orígenes más diversos en el continente africano, según explicaron los investigadores.

“Apoyándonos en estos datos genéticos y otras estadísticas no encontramos imágenes coherentes” que apunten al Este de África, explicó en una conferencia de prensa Mattias Jakobsson, de la Universidad de Uppsala en Suecia, uno de los principales autores de esta investigación.

“De hecho son diferentes partes de África las que aparecen para marcar potencialmente el origen anatómico del hombre moderno”, dijo.

Según él, “estas profundas divergencias genéticas entre los pueblos africanos revelan la complejidad de su historia y hacen pensar que las poblaciones humana se han estructurado desde hace mucho tiempo, y que el hombre moderno podría haber surgido de un grupo no homogéneo”.

El análisis genético también reveló que las poblaciones San originarias de Namibia y de Angola se separaron de los pueblos Khoi y San que viven en el sur de África entre hace 25 000 y 40 000 años.

Carina Schlebusch, igualmente de la Universidad de Uppsala y una de las coautoras del estudio, explicó que “existe una diversidad étnica sorprendente entre los pueblos Khoi-San”. “ Y hemos podido demostrar numerosos aspectos de su historia muy rica que produjo esta gran diversidad genética”, agregó.

El estudio muestra también señales de adaptación local en diferentes grupos Khoi y San.

Los investigadores descubrieron principalmente indicaciones de la obra de la selección de la naturaleza en genes que juegan un rol en la función muscular, la respuesta del sistema inmunitario o la protección de la piel contra los rayos ultravioletas en los Khoi y San del sur de África.

“Aunque todos los humanos modernos tengas variaciones genéticas similares, la profunda divergencia que se produjo hace ahora 100.000 años entre los Khoi-San y el resto de los grupos de población nos permitió detectar los genes que evolucionaron rápidamente en los ancestros de todas las personas que viven hoy en el planeta”, apuntó Pontus Skoglund, de la Universidad de Uppsala, también uno de los coautores del estudio.

Entre estos genes se encuentran aquéllos implicados en el desarrollo del esqueleto que habrían podido jugar un papel determinante en las características anatómicas de los humanos modernos, explicó.


Más Tecnología

EL tatuaje es un arte ancestral. Es una práctica que, según los antropólogos, procede de una remota edad.

El tatuaje es un arte ancestral. Es una práctica que, según los antropólogos, procede de una remota edad. Los investigadores descubrieron una momia del siglo II d.C. con trazos indelebles en la piel; por si quedaran dudas sobre tal datación, en 1991 los exploradores dieron con otra momia, más conocida como el Hombre de Hielo o como Ötzi, con nada menos que 57 tatuajes en la espalda; Cate Lineberry, del Instituto Smithsoniano, ha estimado que estos restos tienen unos 5.200 años de antigüedad. A partir de este hallazgo, se puede decir que el tatuaje es tan antiguo como el propio ser humano. La palabra procede del samoano tátau, que significa golpear dos veces, en referencia a la ancestral técnica de dejar signos sobre la piel humana.

Los neandertales eran coquetos

Sabíamos que eran presumidos, que se colgaban collares hechos con conchas e incluso se maquillaban. Ahora, además, sabemos que tenían otro elemento para adornarse: vistosas plumas de aves. Un estudio internacional en el que ha participado el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha descubierto que los neandertales empleaban las alas de aves rapaces y córvidos como ornamentación, teoría que refuerza la idea de que tenían pensamiento simbólico y los acerca más al Homo sapiens. Los resultados serán publicados en el próximo número de PLoS ONE.

El neandertal (Homo neanderthalensis) es una especie extinta del género Homo que habitó Europa y partes de Asia occidental desde hace 230 mil hasta 28.000 años atrás, durante el Pleistoceno medio y superior y culturalmente integrada en el Paleolítico medio. En un periodo de aproximadamente 5.000 años se cree que convivió paralelamente en los mismos territorios europeos con los hombres de Cromagnon, los primeros hombres modernos en Europa. Esta convivencia se ha demostrado por fósiles hallados en las cuevas de Châtelperron. Tenían el esqueleto robusto, pelvis ancha, extremidades cortas, tórax en barril, arcos supraorbitarios resaltados, frente baja e inclinada, faz prominente, mandíbulas sin mentón y gran capacidad craneal —1.550 centímetros cúbicos—. Vivían en grupos de unos 30 miembros.



Los resultados de este trabajo se basan en el estudio de los restos óseos de 21 especies de rapaces y córvidos encontrados en tres cuevas en Gibraltar. Los análisis indican que de 124 individuos, al menos 18 presentaban marcas de herramientas neandertales e incluso de dientes en las alas. “Estas extremidades están destinadas a funciones de vuelo, son muy ligeras y apenas tienen carne, por lo que creemos que no tenían un fin alimenticio, sino que empleaban las enormes plumas como ornamentación, tal y como siguen haciendo muchos pueblos indígenas en la actualidad”, explica el investigador Juan José Negro, de la Estación Biológica de Doñana.

Una práctica extendida



Los fósiles de Gibraltar proceden de diferentes estratos arqueológicos que abarcan miles de años y han sido comparados con datos de otros 1.700 yacimientos de Eurasia procedentes del Pleistoceno. Los resultados confirman que la manipulación de plumas por parte de los neandertales era una práctica extendida que, por ser las muestras más antiguas anteriores a la llegada del Homo sapiens a Gibraltar, no pudo ser una pauta aprendida de éstos.



“La ausencia de arte rupestre realizado por neandertales no significa que su capacidad cognitiva fuera inferior a la de nuestros antepasados. Simplemente empleaban otro tipo de materiales para expresar su pensamiento cognitivo, como las plumas”, añade el investigador del CSIC.

Grandes y oscuras

Según este estudio, los neandertales mostraban predilección por las aves planeadoras con grandes plumas de color oscuro, como el quebrantahuesos, el buitre leonado, el milano real y el águila real, entre otras.

Como posible causa de la elección de estas aves y no otras, los investigadores apuntan al hecho de que gran parte de las aves encontradas formaban parte de la vida diaria de los neandertales: eran carroñeras y rapaces, moradoras de acantilados escarpados cercanos a sus abrigos y cuevas. “Las plumas son objetos muy ligeros, aportan belleza y volumen. Fueron seleccionadas en la naturaleza, además de permitir el vuelo, como ornamento en las aves, por lo que es lógico pensar que los neandertales hicieran lo mismo”, concluye el científico Negro (ABC).

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Historia de la cuchara

De orígenes poco precisos, el término cuchara proviene del latín cochleare. Según diversos artículos sobre este instrumento, que se los encuentra en la Internet, se puede decir que es uno de los instrumentos más antiguos de los que se ha valido la humanidad, tanto para comer como para servir.
Algunos expertos opinan que desde el Paleolítico los hombres ya utilizaban diferentes tipos de utensilios para poder tomar los alimentos (sobre todo alimentos pastosos o líquidos). Unas veces con forma de pala y otras con un poco más de concavidad.
Dependiendo de la zona geográfica donde estas primeras comunidades estaban asentadas, estos utensilios podían ser de diferentes materiales. Las comunidades asentadas al lado del mar solían utilizar conchas de moluscos. Las del interior se valían de cortezas, huesos y algunas otras materias primas que les eran más fáciles de conseguir. Cada grupo utilizaba lo que le era más sencillo conseguir.
En el Neolítico, según afirman los expertos, las comunidades asentadas en medios rurales, que vivían de la ganadería y la agricultura, elaboraban ya utensilios que les servían para cocinar, para llevarse líquidos a la boca o trasvasarlos.
Muchas de estas sociedades tenían como dieta básica alimentos esenciales como harinas, tomadas en forma de gachas, sopas o purés.
El diseño de las primeras cucharas, aunque todavía bastante rudimentarias, debido a la falta de herramientas de precisión, empezaban a tener una forma bastante parecida a la actual: una pala cóncava y un mango; los materiales más utilizados eran tallas de hueso, algunos tipos de piedra y arcilla cocida.